Una de las preguntas que recurrentemente nos plantean algunas personas es si las constelaciones familiares online tienen el mismo éxito que las constelaciones presenciales. Si nos hubieran preguntado esto hace dos años atrás, probablemente lo hubiéramos dudado, pero luego de la experiencia de estos intensos dos últimos años, nuestra respuesta es sí, y de hecho, esta modalidad nos ha mostrado de manera sorprendente ser igual de poderosa y transformadora.
Aquí te contamos los detalles.
Al iniciarse la pandemia en el año 2020, junto con todas las restricciones que surgieron para asegurar la salud de todas y todos, un grupo de profesionales formados en Constelaciones Familiares y con una amplia experiencia, decidieron reunirse para buscar soluciones y asegurar a las personas la permanencia de este método que se hacía aún más necesario en el contexto del aislamiento e incertidumbre. Fue así que, mediante la experimentación y los ensayos, descubrieron con profundo asombro que las constelaciones familiares sí podían adecuarse al nuevo escenario gracias a los adelantos de la tecnología.
De esta manera, el equipo estableció protocolos de acción que respetaran los lineamientos de la metodología de las constelaciones, y que a la vez se adecuaran al nuevo contexto. ¿El resultado? Un hallazgo sorprendente: Las constelaciones familiares no solo funcionaban a distancia y eran igualmente efectivas, sino que además comenzaron a incluir nueva información útil, proporcionada por el contexto de los representantes y consultantes: cuadros, luces, movimientos, sonidos del entorno, imprevistos, etc. Todos elementos que aportan al resultado final de la constelación.
Otros hallazgos importante que ha permitido observar esta nueva modalidad es que la constelación a distancia le da a los representantes la posibilidad de conectarse de manera más libre con sus sensaciones, probablemente por estar en un espacio propio, lo que les ha permitido transmitir lo que perciben en ellos de forma más orgánica.
Sin duda, bajo esta modalidad las constelaciones se enriquecieron, dando además por cierto desde la experiencia un concepto esencial que abarca esta metodología: “El campo”. Esta nueva forma de trabajo online, demostró que era posible sintonizar más allá del espacio-tiempo con las vivencias y experiencias de personas ubicadas a miles de kilómetros y que no se conocan. A esto se sumó la posibilidad de que muchos más pudieran participar de los talleres desde distintas partes de Chile y el mundo, estando en sus casas o en espacios que para ellos resultaran seguros.
Esto sin duda fue otro gran descubrimiento. La fórmula online ha posibilitado democratizar y difundir una herramienta que hasta ahora había tenido un escenario acotado, llegando incluso a reunir en una misma constelación a cientos de personas de las más diversas latitudes, enriqueciendo la experiencia para todos los participantes; una situación nunca antes imaginada. Esto es especialmente revelador, por cuanto nos instala en una de las premisas de las constelaciones familiares fundamentales: cuando uno sana, sanamos todos. Crear entonces una red tan amplia y diversa, fue uno de los regalos que trajo el descubrimiento de las constelaciones online.
Finalmente, ¿son lo mismo las constelaciones familiares presenciales y online? Quizás hoy podemos decir que son formas complementarias que nos entregan recursos desde sus distintos espacios para poder conseguir un mismo objetivo: sanar a través de una nueva comprensión, incorporando nueva información que abrirá al consultante a otras respuestas y caminos. Las constelaciones online nos han entregado un conocimiento que nos permite ir mucho más allá de lo que conocíamos.
Los invitamos a vivir esta maravillosa experiencia de sanación, a través de nuestros talleres grupales y consultas individuales.